El pasado 30 de abril, casi la totalidad de los trabajadores de tienda La Polar Osorno fueron despedidos, esto tras el incendio que destruyó la sucursal ubicada en calle Eleuterio Ramírez, la madrugada del 20 de marzo. Entre las razones dadas al personal de la tienda, se encontraba el extenso tiempo que tomará la remodelación del local, que podría estar listo, recién a fines de este año. ¿El problema? la empresa esgrimió, como causal de despido lo estipulado en el Articulo 159, inciso 6 del Código del Trabajo: “Caso fortuito o fuerza mayor, es decir una situación ajena a las partes, que no era posible de prevenir que hace imposible realizar el trabajo convenido, como un terremoto o una inundación que destruyen el local de la empresa”.
A raíz de lo anterior, ningún trabajador podía acceder a su indemnización por años de servicio, y según declaran algunos ex empleados, quiénes si lo hicieron, firmaron casi obligados, por montos bastantes menores a lo que correspondería en otros casos.

En conversación con el abogado Luis Gutiérrez Silva, Director de la Federación que tiene agrupados a dos sindicatos de Osorno y uno de Puerto Montt, y asesor jurídico de los trabajadores de La Polar, nos señaló que “fueron desvinculados cerca de 40 trabajadores, integrantes de estos sindicatos, pero por la presentación del proyecto de negociación colectiva, que se hizo el 03 de mayo, estos funcionarios están amparados a fuero laboral desde diez días anteriores a esta presentación. Solicitamos que se respete este derecho, pues los trabajadores estaban con fuero a la fecha que fueron despedidos”
“Dentro del marco legal, en caso fortuito, debe aplicarse cuando el empleador debió haber tomado todas las medidas necesarias para que no ocurriera la causal que le impida seguir con su obligación. Según información preliminar el incendio se inició por una falla eléctrica, y en ese sentido la doctrina dicta que no debería aplicarse esta causal, pues pudo ser evitado con mantenciones periódicas en este tipo de instalaciones, y por qué la ley lo obliga a que se debe a mantener el lugar de trabajo de manera que no afecte la integridad física o psicológica de los trabajares. Entiendo que se informó que previo al incendio los trabajadores y clientes avisaron que había olor a humo, pero todo es materia de investigación”, añadió el jurista.

Sobre el futuro de las negociaciones, Gutiérrez planteó que “hay variantes para los trabajadores, podrían ir a Valdivia o Puerto Montt, pues velamos por la estabilidad laboral de los afiliados. En ese sentido, cualquier oferta que sea buena para ellos, y que ellos estén en condiciones de cumplir, nuestros trabajadores están dispuestos a tomarla, y si no, que se les pagué la indemnización que les corresponde. Eso es decisión de cada uno de ellos. La empresa ha manifestado estar bien financieramente, y perder la plaza de Osorno no es conveniente. Había una baja, pero eran fallas de las estrategias de venta. Antes del incendio no había rumores de cierre o reducción de personal.”.
Durante esta jornada, se nos informó que se presentó la impugnación a la desvinculación de los trabajadores sindicalizados, y a la negociación colectiva, pues la empresa señala que se trata de una negociación “no reglada” la que no derecho al fuero. «En ese sentido la idea era utilizar una negociación reglada, pero la empresa usando la astucia y la descoordinación de los dirigentes, optó por la no reglada. Ahora debemos esperar el actuar de la Inspección del Trabajo y nos cité a audiencia y ver las diferencias entre las partes. No descartamos iniciar un recurso de protección por coartar la libertad sindical en los Tribunales Laborales. No estamos pidiendo limosnas, estamos pidiendo que se respeten los derechos laborales que establecen las normas”, cerró el representante de los trabajadores osorninos.