Por medio de la resolución 676, la Sala de la Cámara solicitó al Gobierno adoptar medidas para lograr que el pago de patentes municipales se realice en las comunas donde las empresas llevan a cabo sus operaciones y no donde se radican sus casas matrices.
El propósito es disminuir la brecha de desigualdad territorial, propendiendo a un desarrollo social más equitativo.
El texto señala que el nivel de desigualdad territorial en Chile sigue siendo evidente. Ello, sumado a la necesidad de potenciar la interdependencia entre la descentralización, el desarrollo regional y local. También, para incrementar la productividad y el crecimiento.
Agrega que, según la OCDE, si se incluyen las capitales regionales, casi el 80% de los ingresos de las patentes municipales están concentrados en las municipalidades pertenecientes a la categoría 1 del Fondo de Incentivo al Mejoramiento de la Gestión Municipal (FIGEM). Este consiste en grandes comunas metropolitanas con alto y/o medio desarrollo, cuya mayoría están localizadas en la región Metropolitana.
Lo anterior se visualiza como algo injusto. En particular, si se considera que, si bien las operaciones principales de una empresa pueden realizarse en una región distinta a la Metropolitana, el pago de patentes municipales debe hacerse en una comuna de la capital. Ello, porque cuenta con su sede u oficina administrativa allí.