Tras el éxito de su primera versión, Frutillar volvió a abrir sus puertas al pasado domingo con la Segunda Feria de Antigüedades, que se desarrolló en la calle techada de Frutillar Bajo, actividad organizada por la Oficina de Medio Ambiente del municipio.
Esta iniciativa buscó reunir a coleccionistas, anticuarios y amantes de lo vintage, fomentando al mismo tiempo la economía circular y la valorización del patrimonio material. Los visitantes pudieron recorrer este espacio para ver objetos con historia que cobran nueva vida.
La encargada de la Oficina de Medio Ambiente del municipio de Frutillar, Fernanda Piedra, comentó que “la segunda versión de la Feria de Antigüedades fue un éxito rotundo porque a pesar de la lluvia hubo expositores de Puerto Montt, Puerto Varas y por supuesto de Frutillar y dentro de los artículos disponibles y a la venta había monedas, billetes antiguos, patentes de colección, balanzas, bandejas, cuadros, libros, entre otros. Esperamos realizar una tercera edición en aproximadamente un mes más”.
La feria se enmarcó en las actividades de promoción cultural de Frutillar, ciudad reconocida por la Unesco como Ciudad Creativa de la Música, y que ha buscado diversificar su oferta cultural con propuestas inclusivas, sostenibles y vinculadas con la identidad local.
